Poniéndonos al día
CAMBIANDO LAS REGLAS DEL JUEGO
Resident Evil 4 fue un juego originalmente pensado para PlayStation 2 que terminó siendo lanzado en 2005 en exclusiva para Nintendo GameCube. Según Capcom (la compañía detrás del juego), PlasyStation 2 no era capaz de mover semejante despliegue gráfico.
Pero a Capcom le gusta más el dinero que a un tonto un lápiz y no tardaron en hacer lo posible por que estuviese en la consola de Sony. Más adelante también saldría para Nintendo Wii, Windows e iOS, y ahora, finalmente, para Android, que como siempre es el último mono.
A pesar de todo, tener este juego en Android es, indudablemente, motivo de alegría, pues aumenta su catálogo de juegos y aporta calidad. ¿Pero por qué?
(Para los que conozcáis la saga, podéis saltaos este apartado. Para los que no, continuad leyendo: quizá queráis saber por qué estamos haciendo el análisis de este juego y no de otro cualquiera).
Resident Evil 4 fue muy importante para la historia de los videojuegos en varios sentidos. Quizá no tanto como Super Mario 64 o The Legend of Zelda: Ocarina of Time, pero sin duda tiene reservado un sitio en el olimpo de los juegos.
Para empezar, fue importante porque significó un cambio radical en la jugabilidad respecto a los anteriores capítulos de la saga. En los anteriores juegos, la cámara era fija, es decir, el personaje andaba por escenarios fijos en los que el ángulo de la cámara no cambiaba. Esto traía problemas sobre todo a la hora de disparar con un arma, ya que era difícil saber hacia dónde estaba apuntando el personaje.
En Resident Evil 4, en cambio, la cámara se convierte en dinámica: enfoca al personaje que controlamos desde su espalda (tercera persona) y lo sigue allá donde va. Esto mejora significativamente la experiencia a la hora de disparar, puesto que en el momento en que apuntamos a un enemigo, la cámara se sitúa en el hombro del personaje y permite mucha más precisión.
Pero esto no sólo cambió por completo la saga Resident Evil, sino que influyó a otras muchas: de Resident Evil 4 beben sagas como Uncharted (PlayStation 3) o Gears of War (Xbox 360, Windows). Y, a su vez, resulta paradójico que Resident Evil 5 beba de Gears of Wars, pero ése es otro tema.
Otro cambio importante fue el acercamiento de la saga al cine, con un enfoque más hacia la acción que hacia el survival horror y unas escenas pregrabadas que parecían las de una película. Además, se introdujeron elementos que recordaban a películas como El Señor de los Anillos o Indiana Jones que prefiero no desvelar.
HISTORIA
Otro tema aparte es la historia. La trama de Resident Evil 4 no es particularmente buena, simplemente entretiene. Cuando en su momento jugué a la versión de GameCube, lo que me gustó no fue precisamente la trama, sino la jugabilidad: era tremendamente divertido de jugar. De todos modos, está bien saber un poco de qué va todo esto.
La trama de los anteriores juegos de la saga giraba en torno a la ciudad de Raccoon City, una ciudad cuyos habitantes habían sido infectados por un virus (T-Virus) creado ilegalmente por la empresa Umbrella Corporation. Esta empresa había ayudado al gobierno local a financiar proyectos para modernizar la ciudad.
En este punto, los Estados Unidos deciden destruir Raccoon City para evitar que el virus siga propagándose. A pesar de ello, Leon S. Kennedy, un policía de la ciudad, sobrevive.
Y aquí es donde llegamos a la trama de Resident Evil 4. La hija del presidente de los Estados Unidos es secuestrada. Sabiendo que Leon está vivo y que tiene experiencia en esto de los virus, los servicios secretos de Estados Unidos lo envían a un pueblo perdido en algún lugar de España (se barajan muchos sitios: los Pirineos, Galicia, cerca de León…). En este pueblo hay una muchedumbre enfurecida con palos y antorchas y un loco suelto con una sierra mecánica (y cosas peores, por supuesto). A pesar de todo, el chico parece no poner pegas.
La cuestión es que en Resident Evil 4 lo que infecta a la gente ya no es el T-Virus sino Las Plagas, unos bichos muy feos que se meten en otros cuerpos (humanos o no humanos) y controlan sus movimientos. Los seres «poseídos» por estos bichos no son los torpes y lentos infectados de anteriores Resident Evil, sino que son bastante más rápidos y espabilados. Tampoco hay Umbrella Corportation, sino una secta llamada Los Iluminados.
Se acabó el calentamiento; pasemos al análisis del juego.
Análisis Resident Evil 4 Mobile Edition
GRAFICOS Y DISEÑO DE ESCENARIOS
El apartado técnico de Resident Evil 4 Mobile Edition deja que desear. Sí, quizá era resultón hace cuatro años (habéis leído bien, ¡cuatro años!), cuando salió en iOS. Pero en pleno 2013, con algunas consolas de la octava generación ya disponibles y otras cerca, y potentes motores gráficos para dispositivos móviles a la vuelta de la esquina (como el Frostbite Go de EA o el Unreal Engine 3), Resident Evil 4 queda en ridículo. Vale, se agradece a Capcom que lo haya traído, pero ha sido tarde y mal.
El modelado de Leon y el de algunos enemigos es correcto, y la primera vez que lo vi me sorprendió, pero no tiene ni de lejos la calidad del juego original. Las texturas son poco detalladas y los colores son planos. Además, los enemigos corren como muñecos controlados por un niño (imaginaos a los personajes de South Park con cara de español y antorchas en la mano), lo cual le quita seriedad al asunto.
Por otra parte, con los escenarios sucede lo mismo: las texturas son de baja calidad y elementos como las tablillas de madera que hay para caminar por los tejados de las casas son como folios: no tienen profundidad. Sin embargo, los colores de los escenarios tienen más matices que los de los personajes: se conservan esa paleta de colores ocres y marrones tan buena del juego original.
Siguiendo con los escenarios, son versiones reducidas de los de la versión para consolas de sobremesa. Por ejemplo, el pueblo del primer capítulo tiene, literalmente, tres casas, en comparación con las bastantes más que había en la versión para consolas.
También carece del vídeo de introducción y de las escenas de vídeo pregrabadas de la versión de sobremesa que se activan a lo largo del juego.
Finalmente, la versión del juego que nos llega no es la de alta definición, que sí se encuentra disponible para iOS. Al contrario, es una versión con una resolución muy mala, diría que pésima, y que además no está optimizada para pantallas grandes como la de los Galaxy Note, provocando que parte de algunos títulos de los menús salgan cortados porque no caben en la pantalla.
Sin embargo, he jugado al juego en un Samsung Galaxy S3 y en un Galaxy Note y la mala resolución no me ha impedido jugar. Pero que sepáis que está ahí.
MODOS DE JUEGO
En el menú principal hay cuatro opciones: Modo Historia, Coin Shoot (disparo a la moneda), Historia de anteriores Resident Evil y Ajustes.
El modo historia se compone de la historia principal y el juego Mercenarios que tan buenos recuerdos dejó. Antes de empezar a jugar a uno de los dos modos, podremos elegir entre cinco niveles de dificultad (principiante, normal, profesional, infierno y extremo), y si hemos conseguido pesetas en cualquiera de los dos modos de juego, podremos canjearlas por armas, munición o hierbas curativas, o bien vender o actualizar las armas que tenemos a por unas más potentes. Por tanto, el juego tiene un toque de rol muy interesante.
La historia principal está dividida en 21 niveles y podemos elegir cualquiera de ellos. Esto quiere decir que podemos jugar a cualquier parte del juego, incluso la última, sin tener que pasarnos las anteriores. Una vez hayamos superados todas, podremos jugar contra el jefe final.
La primera versión para iOS tenía sólo 12 niveles, y si morías tenías que empezar el nivel desde el principio, lo cual era un engorro. Doblando el número de niveles se consiguió solucionar parte del problema. Más adelante se añadieron cinco trucos de pago dentro de la aplicación, entre los que se encontraba el poder seguir desde donde nos matasen. Estos trucos han llegado a la versión Android y sin tener que pagar un euro más, lo cual es un punto para Capcom.
Respecto al modo Mercenarios, sus niveles se irán desbloqueando a medida que vayamos superando los niveles de la historia principal. En este modo tendremos que eliminar a tantos enemigos como podamos en un tiempo limitado y con el arma que se nos diga (en cada nivel se usa un arma diferente). Contra más puntos consigamos, más pesetas obtendremos para invertir en armas para la historia principal.
También tenemos el modo Coin Shoot, parecido al modo Mercenarios, pero en vez de a enemigos hay que disparar a tantas monedas azules como podamos dentro del límite de tiempo.
Por otra parte, en la opción Historia de anteriores Resident Evil, como su descripción indica, se nos hará un resumen de lo ocurrido en la saga hasta este momento. Podremos elegir entre las historias de Resident Evil 1, 2, 3 o 4.
Finalmente, en Ajustes podremos cambiar el volumen de la música y de los efectos de sonido, y cambiar varias opciones de controles, como la velocidad con la que apuntamos o el grado de transparencia de los botones táctiles.
JUGABILIDAD
La jugabilidad es, sin duda, el apartado que más polémica trajo en la versión iOS. La versión de Android, que es la misma, mantiene todos ellos.
Mientras estemos jugando, en la esquina inferior izquierda de la pantalla veremos un joystick virtual. En la inferior derecha, dos botones: uno para apuntar con el arma de fuego y otro para atacar con el cuchillo. Además, en diferentes momentos aparecerán botones contextuales como recoger dinero o munición, o dar una patada al enemigo.
En la esquina superior izquierda hay un botón que nos llevará a una pantalla de pausa con diferentes opciones: inventario, mapa, ajustes del juego, trucos y el objetivo de la misión. Finalmente, en la esquina superior derecha está el indicador de munición y de vida restante.
El control de Leon es un tanto complicado. Cuesta un par o tres de niveles acostumbrarse al sistema, y aún así nos dejará vendidos en más de una ocasión.
Si tiramos la palanca virtual del joystick hacia arriba, Leon irá hacia delante, y dependiendo de la presión que hagamos, andará o correrá. Si la tiramos hacia abajo, irá de espaldas hacia atrás, es decir, siempre mirando al frente. Si, en cambio, la tiramos hacia la derecha o la izquierda, Leon no andará de lado como en un shooter, sino que girará la cámara hacia el lado que indiquemos. Por último, si pulsamos dos veces en la parte inferior del joystick, Leon se dará la vuelta.
Como decía, este control será un suplicio al principio porque la mayoría de las veces que queramos cambiar el sentido de nuestra marcha o el ángulo de la cámara, tendremos que parar y girar el joystick, perdiendo tiempo en el proceso y permitiendo que los enemigos puedan acercarse a nosotros o sorprendernos (es desesperante a la hora de girar una esquina). Sí, es posible cambiar de dirección sin que Leon se pare, pero no es demasiado cómodo, ya que hay que girar el joystick ligeramente hacia un lado mientras se mantiene pulsado hacia arriba.
Por otra parte, tanto si pulsamos el botón de sacar el arma de fuego como el de sacar el cuchillo, Leon se parará para apuntar y, en el caso del arma de fuego, aparecerá un láser para aumentar la precisión.
Si, mientras estamos apuntando pulsamos dos veces en una de las direcciones del joystick, Leon dará un salto lateral para esquivar ataques, pero no podremos disparar mientras corremos, siendo éste uno de los pocos elementos de anteriores Resident Evil que se mantiene en el 4.
Esto, que también estaba en la versión de sobremesa y que aumenta la sensación de indefensión ante los enemigos, habrá quien lo ame y quien lo odie, pero le da un toque survival horror. Por otra parte, aunque apuntemos bien con el láser a un enemigo, no siempre daremos en el blanco, lo cual es sin duda un error bastante grave.
SONIDO
La banda sonora es excelente: logra el objetivo de hacerte estar constantemente alerta y te sumerge por completo en el juego. Además, se adapta a la situación en la que estemos, pero siempre manteniendo los mismos tonos graves.
En cuanto a los efectos de sonido, cumplen sin más. El sonido de los disparos tiene buena calidad, pero el de Leon utilizando el cuchillo deja mucho que desear. En general, los sonidos tienen una sola versión, es decir, por más cajas que rompamos, el sonido siempre será el mismo. Es de agradecer, por otro lado, el haber añadido las voces originales en castellano de los aldeanos, aunque no se oigan a menudo y se limiten a decir «¡cogedlo!» o «¡un forastero!».
Por último, como ya avanzamos hace unos días, el juego está completamente en inglés, lo cual para alguno será una traba para enterarse bien de la historia (que tampoco es que haya mucho de qué enterarse). De todos modos, es una pena que se deje de comprar un juego por no estar traducido al español.
Conclusión
Resident Evil 4 Mobile Edition es un juego que debería estar disponible para Android desde hace mucho tiempo, pero nos ha llegado cuatro años después de la versión en la que se basa (la de iOS), con todo el desfase gráfico y de jugabilidad que eso trae consigo.
También es cierto que nos llega la última versión de iOS con todos los trucos incluidos en el precio del juego (en iOS, juego más trucos sale por unos diez euros, mientras que en Android son cuatro). Pero no es la versión en alta definición, y se nota mucho en la resolución. No es que lo haga injugable, pero pierde mucha calidad respecto a la versión de consolas de sobremesa. Además, no está optimizado para pantallas grandes como las de los Galaxy Note.
Por otra parte, los controles son terribles. Terminas acostumbrándote a ellos, pero no son accesibles para todo el mundo: quien no tenga paciencia, acabará frustrado y lo abandonará.
Sí, la música es excelente, y es un lujo poder llevar siempre en tu bolsillo el Resident Evil 4. Pero no sé hasta qué punto eso compensa sus puntos débiles. Capcom se ha limitado a llevar la versión de iOS tal cual a Android, sin preocuparse por adaptarla a la resolución de cada modelo ni pulir el control o los gráficos de un juego que tiene ya cuatro años a sus espaldas.
Comprarlo o no comprarlo. Sinceramente, no sé qué recomendaros. Llevo varios días jugando con él y al principio estaba muy ilusionado porque me traía muy buenos recuerdos: fui de los que lo compró el mismo día que salió a la venta para GameCube y lo disfruté como he disfrutado muy pocos juegos. Pero enseguida me di cuenta que ésta era una versión descafeinada del juego original.
Lo recomendaría para nostálgicos, para quien le guste tener una variada colección de juegos en Android o para quien nunca lo haya jugado y que, por cuatro euros, quiera disfrutar de un aperitivo del juego. Pero si sois de éstos últimos y queréis jugarlo para conocer una pieza importante de la historia de los videojuegos, haceos mejor con una copia para consola de sobremesa u ordenador y disfrutadlo como se merece.
Nota: El juego se encuentra disponible en exclusiva en Samsung Apps, la tienda de aplicaciones de Samsung. De momento, sólo aquéllos con un teléfono Samsung podrán descargarlo | Enlace al juego en Samsung Apps